Tras la Media Maratón de Getafe del domingo pasado, esta semana ha sido bastante tranquila en lo referente a entrenamientos.
Parece que cuando acabas uno de los objetivos marcados, el coco te pide relax y quedarse en blanco durante unos días.
Y eso ha sido lo que ha tocado esta semana. Trotes suaves y sin mas objetivo que mover un poco las zapatillas. Cansado y con las piernas cargadas. Además estos días ha pegado duro el aire en Madrid lo cual complica un poco más esto de salir a correr.
MIERCOLES: 40´. Salí de trabajar y me fui a casa corriendo. Las piernas no respondieron tan mal como me pensaba, así que las sensaciones fueron buenas. 7,5 kilómetros a la buchaca.
JUEVES: 30´. Día tranquilo. Al trabajo corriendo de madrugada. Con fresquito, pero llevadero. Tomé uno de los caminos más cortos pero también más empinado. Desde el estadio del Atletico de Madrid hasta la Puerta de Toledo es una constante subida. Y además con buenos desniveles. Me lo tomé con calma. 5,5 kilómetros y listo que no daba para mas.
SABADO: Coño con el viento. Salí de trabajar, me calcé las zapatillas y a casa corriendo. Día duro. Pegó el viento con fuerza y los ratos que daba de cara (la mayor parte por cierto) se hacía complicado coger algo de ritmo. Aún así las sensaciones fueron bastante buenas y saqué 51´ camino de casa. 10 kilómetros. Contando que tuve 2 kilómetros de constante subida desde el Puente de San Isidro hasta el Parque de las Tres Cruces doy por satisfecho el ritmo. Es más, hubo ratos, sobre todo en Madrid Río que saqué parciales por debajo de 5,00. Me permití el lujo de apretar en el último 3000. Bien. De los días que me dejan satisfecho.
DOMINGO: Otra vez madrugón y al trabajo corriendo. Cansado y con las piernas como troncos. He salido con las Merrell. En plan minimalista. Así que tapo el reloj (que no me apetece agobiarme) y me voy a Madrid Río. Ida hasta casi el puente de los Franceses, vuelta y a subir la Cuesta de San Vicente. Paso por delante del Palacio Real (una gozada a las siete de la mañana la calma que se respira) y subo por la calle Mayor. Los últimos 500 metros que pican hacia abajo me vengo arriba y me pongo en torno a 4,00 min/km. Hay que hacer ganas de desayunar. Al final no ha salido una mañana para tirar cohetes pero bueno. 45´ y 8,300 kilómetros más a sumar a esta semana "tranquila".
Y a partir de ahora empezamos a prepararnos para la cita grande este primera parte del año: ROCK N´ ROLL MARATHON MADRID 2013. Ese es el objetivo y a partir de ya todos los entrenamientos van dirigidos a llegar en la mejor forma posible.
Así que ya sabéis: Es tiempo de Rock and Roll.
Por cierto, si os apetece os dejo el enlace donde escuchar la presentación del equipo Drinkingrunners A tu Ritmo, del que tengo la suerte de pertenecer. Echad un vistazo aquí: El día que nos presentamos fue el luner, 28 de enero.
Espero que os guste.
Abrazos.